Hace varios años, cuando se anunció la implementación de la tanda extendida, inmediatamente nos embargó la presunción de que se implementaría el tallerismo en el horario que se le agregaba a la tanda tradicional de la mañana, con el propósito pedagógico de aprovechar el tiempo que se agregaba a partir del almuerzo.
Creímos que:
a. La currícula iba a ser modificada para adaptarla a las tres horas que se agregaban a la tanda matutina.
b. Que se tomaría en cuenta el sueño que nos entra después de comer.
c. Que con la implementación de cursos talleres se combatiría la flojera que se manifiesta unos 30 minutos después de comer, en pleno proceso de digestión, cuando el diafragma sube un poco y se respira con torpeza, creando una sensación de falta de oxígeno que se traduce en entorpecimiento, causado por la llegada de los nutrientes a la sangre, lo que genera un incremento de los niveles de serotonina provocando la inevitable disminución de la circulación y el organismo se concentra en el aparato digestivo.
Cuando se anunció la implementación de la tanda extendida en el gobierno del señor Danilo Medina, propuse que se introdujera el tallerismo como estrategia pedagógica para introducir diversidad y mantener abierta la atención del estudiante, permitiéndoles que escojan una actividad y que no se sintieran compelidos a estudiar no como obligación sino como un deber de su proceso de formación y como un requisito para realizar el proyecto de vida profesionalizante.
Como era de esperarse, por razones obvias, no se hizo caso a esa sugerencia. Y se desperdició esa oportunidad para académicamente intervenir en la motivación de la participación de la juventud en su propia formación educativa.
Hoy nos llena de satisfacción que el Gobierno de Luis Abinader anuncia un millonario plan para transformar 79 liceos en politécnicos, que no será otra cosa que la implementación de la docencia tallerista que va a permitir que los alumnos participen en la toma de decisiones e incorporen actividades que llamen su atención o consideren importantes para su crecimiento personal y sobre todo, que permitirá la integración oportuna de muchos jóvenes al mercado laboral.
Este Programa de Mejoramiento de la Educación Formación Técnico Profesional en Artes, va en serio, se ha anunciado que una parte importante de la conversión será con un préstamo a muy bajo interés y a un muy largo plazo de US$60 millones proveniente del Banco Interamericano de Desarrollo –BID-.
