PUERTO PLATA.-El municipio Imbert, de esta provincia, fue escenario el domingo de dos manifestaciones pacíficas: una en contra de que las granceras en la comunidad Saballo continúen operando y otra por parte de los camioneros defendiendo su permanencia.
“Que no se muera el río, fuera las granceras”, gritaban los comunitarios quienes desafiaron un radiante sol para defender el río Bajabonico, afluente que, según dicen, tres granceras sacan materiales a toda hora.
Cipriano Francisco (Fifi), vocero del grupo Pro Río Bajabonico, llamó al presidente Luis Abinader parar el daño medioambiental que las granceras están ocasionando al afluente desde el año 1996.
Lamenta que el director provincial de Medio Ambiente, Raúl Brugal, y el procurador de Medio Ambiente de Puerto Plata, Elvis García, están de brazos cruzados ante el reclamo de los inberteños.
A la comunidad se unió el padre Nelson Cruz, quien dijo que es una necesidad salvar el río Bajabonico.
Mientras que, en la otra campana están los camioneros, quienes defienden que las granceras permanezcan en la comunidad Saballo, al tiempo de calificar como una mentira de que estas empresas saquen materiales del río Bajabonico.
Indican que no se oponen a las medidas tomadas por Medio Ambiente y Recursos Naturales en procura de preservar el río Bajabonico, pero consideran que no se debe cerrar las operaciones de las granceras de las minas existentes.
Advirten que de cerrarse estas empresas cientos de personas de Imbert que tienen un empleo pasarían hambre y la miseria se apoderaría de ese pueblo.
